¿Te estresas a veces? Algunos días no somos nosotros mismos y eso está bien. Porque, por muy maravilloso que sea nuestro cuerpo (lo que le permitimos recuperar), a veces necesita un poco de ayuda. El masaje en silla ASMR es una forma de hacerlo.
Este masaje en silla ASMR está diseñado para ayudarte a sentirte increíble al ejercitar las torceduras de tus músculos y eliminar las distracciones. 25 de noviembre, La vuelta al mundo: ¿Qué es ASMR? Y esto significa que podemos sentir placer con algunos sonidos o toques ligeros. Estas son algunas de las mejores razones por las que deberías considerar el masaje en silla asmr por ti mismo.
Este simple activador se puede realizar en cualquier lugar: una de las mejores cosas del masaje en silla ASMR es que no necesita herramientas especiales ni mucho espacio. Puedes hacer esto casi en cualquier lugar, desde tu casa hasta la escuela o incluso en un parque.
Relajar nuestros músculos: Hay momentos en los que nos sentimos estresados que pueden provocar una tensión en los músculos que los hace sentir incómodos. Una forma de aliviar parte de esta tensión es algo maravilloso llamado masaje en silla ASMR.
Practica la atención plena: La atención plena es prestar atención al aquí y ahora con intención, sin juzgar nuestros propios pensamientos y emociones. Al practicar la atención plena mientras damos masajes en silla ASMR, nosotros, los novios, podemos sentirnos más arraigados y en paz en el momento.
Coloque los dedos a cada lado de la parte posterior de su propio cuello y los músculos de los hombros, presione hacia abajo suavemente usando las yemas de los dedos para agarrar (no pellizque), sostenga durante dos segundos. O con movimientos circulares puedes masajear las sienes o la nuca, lo que puede suponer un auténtico placer para ti.
Espalda baja y cadera: presione suavemente una mano para bajar la espalda; mientras tanto, el otro se aplica en las caderas. En trazos más largos o en pequeños círculos. Puedes coger cualquier pelota de tenis o un rodillo de espuma si está disponible y templar tu espalda de la misma manera.